El 90 % de los problemas que aquejan hoy al agro argentino se centra en los inconvenientes con el comercio exterior debido a las retenciones y manipulación del mercado de exportaciones. Con la asunción de Javier Milei como presidente de Argentina, el próximo 10 de diciembre, el sector productivo del vecino país espera un cambio positivo para normalizar la cuestión comercial, señaló a Nación Productiva el productor e influencer de América Latina, José Antonio Álvarez, más conocido en las redes sociales como Bumper Crop.
Bumper Crop comentó al agroclásico de los domingos que la normalidad en el comercio exterior debería ser una de las primeras acciones que tiene que gestionar el presidente electo en Argentina, Javier Milei, para mejorar la situación del campo, ya que en la actualidad representa el 90 % de los problemas para el agro, mientras que las problemáticas son secundarias y pueden ser resueltas por el sector privado (falta de financiación) o por el Estado, en los casos que correspondan (falta de caminos y canales).
Con la vuelta de rosca en el Gobierno argentino, Álvarez indicó que el principal cambio está en la promesa de Milei de bajar los gastos públicos. “No llegan inversiones hasta que no llegan las bajas de impuestos, y la baja de impuestos no ocurre hasta que no se baje el gasto público”, enfatizó.
De reducirse los derechos de exportación y los disturbios en el tipo cambiario, Argentina tiene la capacidad de duplicar su produccion en pocos años más, tal como lo hizo Brasil en la última década, agregó el productor.
Explicó que el 70 % de los dólares que ingresan a la Aduana argentina proviene del agro y que el 93 % de su balanza comercial está vinculado con el sector productivo. “Ahí naturalmente surge un valor agregado, que es algo aparte; cuando el dinero queda en manos de las empresas, son las empresas las primeras que buscan agregarle valor a los productos que hacen”, sostuvo.
En la actualidad, Argentina aplica una retención del 33 % sobre el valor bruto de las exportaciones de soja, 12 % en los envíos de trigo, maíz y cebada, en tanto que un 7 % es aplicado al girasol, acotó el entrevistado.
“El daño no acaba ahí porque de haber una brecha cambiaria con respecto al dólar que se pueda adquirir para ahorro e inversión posterior, también hay un cierre y una apertura de mercados que hacen que los exportadores no pujen. En realidad, la quita real de precios no es solamente la retención o la brecha cambiara, sino que también depende de la falta de puje en el mercado, que en muchos casos suma el 70 % del valor real de las exportaciones”, destacó.
[Foto : Archivo / Disertación de José Antonio Álvarez durante +Maíz Congreso Nacional de la Cadena Productiva]
