Corea del Sur y Japón son mercados que importan carne 100 % identificada. Es por ello que se resalta la importancia de la implementación del Sistema de Identificación Animal del Paraguay (SIAP), recientemente aprobado en la Cámara de Diputados y remitido al Senado para su estudio, ya que no solo fortalecerá el control sanitario y los procesos de la cadena de producción, sino que también mejorará la competitividad y el posicionamiento internacional de la proteína roja paraguaya, garantizando su calidad e inocuidad.

 

Paraguay ha enviado las documentaciones que son necesarias para avanzar con el proceso de habilitación de Corea del Sur y Japón para la carne bovina, indicó a Productiva el Dr. José Carlos Martin Camperchioli, presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa). Sin embargo, ambos países tienen como exigencia la compra de carnes que cuenten con la trazabilidad ganadera.

 

En ese sentido, el titular del Senacsa destacó la aprobación que tuvo en la Cámara de Diputados, el pasado 12 de julio, el Proyecto de Ley “Que instituye el Sistema de Identificación de Animales del Paraguay (SIAP)”, considerando que después de cuatro años de arduo trabajo entre el servicio veterinario oficial y el sector privado ya se podrá apuntar hacia la rastreabilidad animal desde el nacimiento hasta la faena, incluyendo los eventos de movimiento, vacunación y controles sanitarios.

 

Manifestó también que la alianza estratégica público-privada juega un papel importante para dar inicio al uso de esta herramienta. Martin señaló que este año fue enviado al Ministerio de Hacienda un pedido de ampliación presupuestaria para la compra de 2 millones de caravanas.

 

Hoy se tienen casi USD 20 millones para la compra de caravanas”, puntualizó, considerando que se necesitarán entre 2,5 millones y 3 millones por año porque ya se consensuó con el sector privado que la identificación se va a iniciar solo con animales nacidos.

 

Trazabilidad del ganado bovino. El proyecto que cuenta con media sanción de Diputados será remitido a la Cámara de Senadores para su estudio.

 

El documento establece que la identificación se implementará, inicialmente, al ganado bovino, pero podrá abarcar otras especies con potencial productivo, como ovinos, caprinos y equinos.