El comportamiento histórico en la producción de maíz zafriña 2022 le ayudó al agricultor a salvar una parte de las deudas generadas por el quiebre productivo de la zafra de soja 2021/2022, resaltó al programa Nación Productiva Eduardo Kempf, gerente comercial de Agro Alianza Santa Catalina S.A., establecimiento ubicado en Carlos Antonio López, departamento de Itapúa.
Sin la buena zafriña de maíz de este año, respaldada por las condiciones ambientales y de mercado, el escenario para el productor hubiera sido aún más desafiante a nivel financiero, aseguró Kempf a Nación Productiva, el agroclásico de los domingos emitido a las 20:00 en canal PRO.
El entrevistado agregó que el área de siembra de maíz en la zona de Itapúa ha estado creciendo en los últimos tres años. Comentó que en la zafriña 2022 el precio bastante atractivo del cereal y la escasez de semillas de soja fueron los principales fundamentos para una mayor adopción de este rubro.
En el caso de la empresa, explicó que los resultados del maíz de entrezafra cubrieron entre el 15 y el 20 % de las deudas de la campaña pasada de soja, donde solo se alcanzó entre el 25 y 30 % del volumen proyectado al inicio.
Por otra parte, indicó que este año el volumen de acopio de maíz de la empresa tuvo un incremento del 30 a 35 %, a pesar de la baja calidad del grano a causa de la aparición de enfermedades como Gibberella zeae, que ocasiona la pudrición de la mazorca, entre otros inconvenientes.
Con relación a este punto, Kempf señaló que la estrategia consistió en un esfuerzo operacional de la empresa para segregar los granos de acuerdo con el nivel de calidad. Asimismo, fue necesario la venta del producto a un menor precio.
A pesar de los desafíos, el gerente comercial de Agro Alianza Santa Catalina S.A. motivó a los agricultores a seguir produciendo más alimentos y a tener esperanzas.
