Corteva Agriscience organizó varios encuentros en diferentes zonas productivas del país, dentro de la Gira Omnira Active Connection, en donde estuvieron Camila Pinho y Carolina Deuner, profesoras de la Universidad Rural de Río de Janeiro y de la Universidad Passo Fundo, respectivamente, quienes compartieron con productores de nuestro país las problemáticas y estrategias en torno a las malezas y las enfermedades que son las principales limitaciones para alcanzar la máxima productividad en el cultivo de soja.
La Dra. Camila Pinho hizo énfasis en que Arylex es un principio activo importante para la desecación y el manejo de malezas, considerando la creciente aparición de las plantas indeseadas en las parcelas de los agricultores. Esta molécula está presente en dos productos importantes de la firma (Pixxaro y Texaro).
Así también, destacó la importancia de utilizar herbicidas posemergentes, herbicidas de contacto correcto para controlar el banco de semillas, de tal manera a tener una soja limpia.
Arylex tiene auxinas que se translocan vía floema y eso le da la capacidad de soportar una deficiencia de agua. En una condición de sequía este producto también entrega el mismo nivel de eficacia, comentó.
Sobre la respuesta de Arylex, instó, igualmente, a respetar el periodo de carencia entre siete a 10 días, dependiendo del tipo del suelo, para asegurar el efecto. En cuanto al manejo de la maleza según el tamaño, precisó que es relativo, ya que hay que manejarla de acuerdo con el número de hojas.
Enfermedades. Por su parte, la Dra. Carolina Deuner, experta brasileña en Etiología y docente de la Universidad de Passo Fundo (Brasil), habló sobre las principales enfermedades de la soja y recalcó los tres pilares fundamentales dentro del manejo como la elección correcta del fungicida, la aplicación correcta y la problemática en particular.
Mencionó que las formas de controlar las manchas foliares son dos: vía tratamiento de semillas y a través de la parte aérea. Los tres grupos químicos claves, en este caso, son las carboxamidas, triazoles y multisitios, acotó.
Recomendó utilizar los fungicidas en cada etapa del cultivo y en función a las enfermedades que necesitan ser controladas. El periodo sugerido puede ser por medio de la aplicación cero, entre líneas a través del uso de protioconazole y carboxamidas, acompañado de los multisitios en todas las fases de producción con excepción de la aplicación cero.
“Las enfermedades de final de ciclo son controladas ya en las primeras aplicaciones, por eso cuando hago la aplicación cero gano una aplicación más segura. El momento de controlar es al inicio del ciclo o dependiendo del productor”, explicó.
El intervalo de aplicaciones, en tanto, debe darse de acuerdo con el tipo de producto; por ejemplo, en el caso de carboxamidas se recomienda un periodo de 15 días, en tanto que los triazoles y estrobirulinas, 12 días, añadió la profesional.
Sugirió hacer las recomendaciones en el momento oportuno, comenzando con las aplicaciones de buenos productos, respetar el intervalo de aplicación entre cada una, utilizar multisitios y trabajar sobre la resistencia genética asociada.
[Material publicado en el segmento Actividad de la edición Nº 96 de octubre de Revista Productiva, página 32]
[Foto : Revista Productiva]
