La merma proyectada en la producción de soja 2022/2023 en el departamento de Canindeyú sería entre el 25 al 30 % debido a que el prolongado periodo de estrés hídrico registrado afectó las etapas críticas de desarrollo de los cultivos tempraneros, mencionó al programa Nación Producto Ilvo Spielmann, productor de la zona.

 

Al consultarle si algunas parcelas podrían recuperarse de esta mala condición, respondió que es muy difícil, ya que los daños se registraron en las etapas de crecimiento más importantes de la soja. “Están con una estatura muy baja y afectó al proceso crítico de floración y formación de vainas”, recalcó.

 

Reportes de agricultores de Canindeyú indican que la condición del cultivo es complicada debido a la prolongación del estrés hídrico, específicamente en aquellas parcelas que se encuentran en el momento crítico del llenado de granos.

 

En ese sentido, Spielmann mencionó a Nación Productiva que en la zona se tuvo 30 a 45 días de estrés hídrico y las últimas lluvias registradas fueron bastante disparejas (entre 5 hasta 100 mm), dependiendo de las localidades. Subrayó esta situación generó retrasos en el desarrollo de los cultivos de soja, por lo que la merma productiva se mantendría entre 25 a 30 %.