No cabe duda de que afrontamos un proceso de incorporación constante de tecnología en la actividad pecuaria, con el firme propósito de apuntalar una producción más sostenible. En ese afán, Ganadera Los Lazos, en conjunto con la Asociación de Criadores de Brangus del Paraguay, desarrolla el Programa de Consumo Residual, más conocido como RFI -por sus siglas en inglés- (Residual Feed Intake), que es una medida de eficiencia alimenticia; es decir, una medida que relaciona la cantidad de alimento necesaria por unidad de producto generado, ya sea ganancia de peso o producción de leche.
El Ing. Agr. Jorge Bobadilla, gerente de producción de Ganadera Los Lazos S.A., comentó que la unidad de producción cuenta con una capacidad para albergar a 6000 cabezas de ganado, que son recriadas en pasturas en el departamento de Boquerón (de producción propia) hasta llegar a un peso de 350 kg o más y, posteriormente, retornan para la terminación de 100 a 120 días.
Señaló que en el Chaco tienen un plantel de la raza brangus para la producción de reproductores y posterior venta, como parte de un programa de selección. Es así que dentro de este proceso la empresa incorporó las pruebas de RFI en el confinamiento para la medición de los animales.
Comentó que se evaluaron casi 200 toros y ya tuvieron las primeras producciones de estos machos. Cuando estos animales lleguen al confinamiento se tendrán los primeros resultados de eficiencia.
El objetivo es comercializar toros con datos sobre el nivel de eficiencia alimenticia, cuyo propósito es disponer de animales superiores que sean capaces de ganar más kilos de carne consumiendo menos alimentos; es decir, que sean más rentables.
Por su parte, el Ing. Zoo. Raúl Bertho, coordinador internacional de Intergado (Brasil), mencionó que el día de campo en Ganadera Los Lazos S.A. fue desarrollado con la intención de presentar las pruebas de Consumo Residual de Alimentos. Esta metodología busca conocer la cantidad de consumo diario de alimentos por cada animal y en la ocasión se probaron casos de 55 animales durante un lapso de 54 días, sin contar el periodo de adaptación.
A través de esta prueba se pretende identificar la mejor genética. Por dar un ejemplo, indicó que se registraron dos animales con ganancias de peso muy parecidas (1.3 kg), pero ambos con un consumo muy distinto de alimentos (8.3 kg y 11 kg), lo que da una diferencia de consumo de cerca de 3 kg. Con la prueba de eficiencia alimentaria se evalúan las estadísticas de todos los animales y se elabora un ranking de los mejores ejemplares, a fin de determinar las principales características como RFI, ganancia de peso, junto con la parte de consumo.
Economía. En su disertación, Stewart Kambo, responsable técnico de la Asociación Argentina de Brangus, habló sobre las características del RFI para la identificación de la eficiencia en la ganancia de peso de un animal. Esta información es de interés del productor porque permite analizar los costos de alimentación del ganado, margen bruto, eficiencia en conversión y los valores de mercado actuales.
“Si vamos a una eficiencia destacada, que podemos identificar con estos comederos, vemos que puede ser un 10 % mejor, es decir, que para lograr la misma ganancia de peso comen un 10 % menos. Esto en un ciclo de 120 días, es lograr un ahorro de USD 152”, explicó.
Posteriormente, el Ing. Zoo. José Volpe, técnico de ultrasonografía de carcasa, refirió que en el RFI se llevan a la par las evaluaciones de carcasas en los individuos que están siendo testeados, a fin de acompañar los datos superiores en conversión y carcasa. Estas dos características se analizan para identificar el individuo ideal.
Dentro de la dinámica de la presentación se expuso que no necesariamente dos animales con el mismo peso, frame y raza tienen una igual composición carnicera. “Lo que queremos demostrar es que el ojo humano no es capaz de ver qué hay debajo del cuero; el peso no es una medida que te indica cuánto de eso es realmente composición de carne”, detalló.
Si estas informaciones se trasladan a un rodeo comercial, en conjunto con la incorporación de genética de animales testeados con RFI negativo, se podrá tener animales eficientes en conversión y calidad carnicera, manifestó.
Institución. El presidente de la Asociación de Criadores de Brangus del Paraguay (ACBP), Miguel Reinau, destacó que se suma una nueva herramienta para el ganadero, con miras a reducir los errores y ser más eficientes en rentabilidad.
Resaltó, además, que en Paraguay hay padres de referencia y esta tecnología ayudará a demostrar ese potencial al mundo. “Estamos contentos con esta iniciativa de la Brangus y por todos los productores que apostaron al traer sus toros; creo que esto vino para quedarse e ir sumando datos para mejoramiento de cualquier ganadero”, enfatizó.
Congreso. Esta jornada de campo se desarrolló como parte del Primer Congreso Internacional de Nutrición Bovina, organizado por Gestión Ganadera los días 15 y 16 de junio. En ese momento, su director, Dr. José Frutos, comentó que la actividad fue todo un éxito, ya que contó con ponencias y debates muy productivos, enfocados en la eficiencia de la alimentación, nutrición y manejo de datos para la toma de decisiones.
El evento contó con la participación de profesionales nacionales e internacionales. “Tuvimos más de 450 personas. Según la evaluación, el 60 % son profesionales y productores y el 40 %, estudiantes”, destacó.
[Material publicado en el segmento Ganadería Productiva de la edición Nº 105 de julio de Revista Productiva, páginas 18 y 19]
[Foto : Revista Productiva]