Las perspectivas para el sector porcino en Paraguay indican que para el 2030 la producción de cerdos llegaría a 221 669 toneladas, el triple de lo registrado en 2021, cuando se produjeron 72 222 toneladas, según datos compartidos hoy en la presentación del trabajo de la Mesa de Competitividad de la Cadena de Valor Porcina, un evento organizado por el Viceministerio de Ganadería (VMG), en el Salón Social Dr. Germán Ruiz de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), en la ciudad de Mariano Roque Alonso.
Con la presentación a cargo del viceministro de Agricultura y Ganadería, Dr. Marcelo González, la Mesa de Competitividad de la Cadena de Valor Porcina, una alianza entre los sectores público y privado, divulgó las “Perspectivas para el Sector Porcino en el Paraguay”.
Con base en las estimaciones realizadas por el equipo de investigación de mercados de la Consultora 3tres3 Latinoamérica, a partir de cifras reportadas por el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), se prevé que para el 2030 la producción nacional de cerdos se triplicaría y alcanzaría 221 669 toneladas, es decir, 149 447 toneladas más que el 2021 (72 222 toneladas).
En el informe se subrayó que la población porcina al 2022 se concentró en Itapuá (39,8 %), Alto Paraná (35 %), Caazapá (2,3 %), Caaguazú (2,6 %), Canindeyú (7,5 %), San Pedro (4 %), principalmente.
Al 2020 el consumo interno de carne porcina en Paraguay llegó a 9 kg/año, el más alto de los últimos ocho años, pero aún bajo respecto al promedio de China (57 kg/año), Europa (41 kg/año), Brasil (17 kg/año), Uruguay (16 kg/año) y Argentina (15 kg/año).
Durante la presentación se resaltó que el consumo de carne de cerdo está instalado en la población. Son 9 de cada 10 personas que la consideran entre sus opciones de carne.
La carne de cerdo es encontrada en al menos 3 comidas de las 60 que una persona puede hacer en el mes, aunque todavía está muy por debajo de la frecuencia de consumo de la carne vacuna y la de pollo, que son las más arraigadas en la mesa paraguaya. La carne porcina es considerada una opción para salirse desde la cotidianeidad de las comidas o compartir en ocasiones especiales.
Entre las fortalezas de esta proteína, se puntualiza el sabor, la ventaja competitiva del precio frente a otras carnes y el fácil acceso a ella en los puntos de venta.
Planes estratégicos de la cadena porcina. En cuanto a los aspectos a trabajar desde el Gobierno y el sector privado, se mencionó la alternativa de potenciar el consumo de la carne de cerdo buscando incluirla como producto en la canasta básica familiar para aumentar la frecuencia y disminuir la percepción de producto ocasional.
Además, la implementación de una estrategia y plan de comunicación abarcando cada uno de los segmentos poblacionales investigados para fortalecer los beneficios y factores positivos de consumo, así como mitigar o desmitificar las percepciones y creencias negativas en torno a la carne porcina.
