La medida populista del presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva de eliminar temporalmente el arancel a la importación de arroz podría generar grandes contratiempos a las exportaciones del cereal paraguayo al vecino país, su principal mercado. Hasta ahora solo las compras del cereal provenientes de países del Mercosur tenían arancel cero. Con esta decisión, que regirá hasta fin de año, las del resto del mundo también estarán libres de impuestos aduaneros.
Con esta medida, según publicó el martes de esta semana el Gobierno de Lula en el boletín oficial, se busca evitar problemas de desabastecimiento o un aumento del precio del producto en el mercado brasileño por la reducción de la oferta, tras las históricas inundaciones en Mato Grosso do Sul, el mayor productor de arroz de ese país.
A partir de ahora Lula le abre las puertas de su país al arroz de todo el mundo, una medida que puede afectar a los proveedores de arroz de calidad del Mercosur. En particular, nuestro país tiene al vecino como principal mercado del cereal nacional y de acuerdo con datos del BCP, Al cierre de abril Paraguay exportó 360 000 toneladas a Brasil, que representa un volumen 10 % superior en comparación con el mismo periodo del año pasado.
Tiago Barata mencionó a Productiva durante el III Simposio de Matrisoja, Revolución en campos bajos, realizado este jueves en el Sheraton Asunción Hotel, que esta medida se venía manejando hace tiempo, pero que se adelantó debido a las inundaciones en Rio Grande do Sul.
Barata explicó que el mercado asiático amplió su área de siembra y por ende, su producción, lo que genera una oferta con precios más bajos y Brasil podría decidir importar arroz de esa parte del mundo, sin tener en cuenta que la población brasilera está acostumbrada a un producto con calidad superior que sus países vecinos le brindan siempre.
«Aunque inicialmente tenga precios más baratos, nos preocupa que estén ofreciendo un producto de inferior calidad», comentó.
Puntualizó que el producto que ofrecen los países del Mercosur es suficiente y puede satisfacer la demanda brasileña. «Tenemos una garantía de producción con nuestros vecinos del Mercosur, lo que ofrecen es suficiente para satisfacer nuestra demanda. Pero vamos a tener que vivir con esto, es una decisión superior y esperemos que en cuanto el mercado se recupere ya pueda quedar naturalmente regulado», finalizó Barata.
Según declaraciones del ministro de Agricultura Carlos Fávaro, en una entrevista con el sitio g1, la decisión se debe al alza, supuestamente especulativa, de hasta 30 % en los precios del arroz. “Dimos una demostración al Mercosur de que si quiere especular, nosotros buscamos (arroz) en otro lugar”, dijo en una crítica a sus socios del bloque que completan Paraguay, Argentina y Paraguay y Uruguay.
“Nuestro objetivo es evitar la especulación financiera y estabilizar el precio del producto en los mercados de todo el país”, indicó a su vez el ministro en un comunicado.
Las gremios que representan a los productores de arroz en Rio Grande do Sul afirmaron, sin embargo, que “no existen riesgos de desabastecimiento” en el mercado de consumo, dado que “más del 84 % del área plantada” había sido cosechada antes de las inundaciones en el estado.