El Ing. Agr. Ken Moriya, coordinador técnico y científico de la Federación Paraguaya de Siembra Directa para una Agricultura Sustentable (Fepasidias), y disertante del Encuentro Nacional de Siembra Directa y 2º Encuentro Mundial del Sistema de Siembra Directa, se refirió en Nación Productiva a los desafíos del manejo del suelo en la nueva frontera agrícola (campos bajos y Chaco) y explicó cómo el SDD puede ayudar a mejorar la producción en esas zonas.

 

Moriya aseguró que si se ponen en práctica en los campos bajos los tres principios básicos del sistema de siembra directa: no remoción del suelo, cobertura y rotación de cultivos, se puede ver la contribución de este esquema de producción tanto en el suelo como la planta, ya que permite hacer ajustes según los ambientes a fin de solucionar el problema principal.

 

«Campos bajos está en equilibrio permanente, pero lo que pasa es que al entrar en un proceso productivo donde removemos el suelo, tenemos toxicidad del hierro, del aluminio, etc. Entonces, lo que debemos introducir son los principios del sistema de siembra directa y acompañar los ajustes a realizar», sostuvo.

 

Asimismo, refirió cómo el sistema puede contribuir positivamente ante la falta de agua en el Chaco, ya que ayuda no solamente en la infiltración del líquido, sino también en la retención del almacenamiento y luego en la disponibilidad.

 

«Si entramos con el sistema en el Chaco, va a contribuir, por ejemplo, con la reducción de la formación de peladares y luego vemos qué otros ajustes hacer, ya que eso permite este sistema», acotó.

 

Finalmente, explicó que el rol fundamental lo tiene el productor, ya que es él quien debe probar el sistema, acompañado por la investigación.

 

«La gran contribución que puede haber por parte de los propios productores al probar el sistema, la aplicación, los principios y la investigación, de tal manera a ir haciendo los ajustes, porque no es solamente química y física, sino también biológía, que es fundamental», concluyó Moriya.