Tras las bajas de la semana pasada, y desde el nivel de precios más deprimido en casi cuatro años, la soja volvió a cerrar este lunes con importantes bajas en Chicago. La oleaginosa culminó la rueda con disminuciones de USD 9,92 y USD 9,09 la tonelada en las posiciones de agosto y setiembre, por lo que las cotizaciones quedaron en USD 396,10 y USD 379,84, respectivamente, de acuerdo con el informe de Granar.
Al final de este lunes, el contrato de agosto de la soja pasó de USD 406,02 a USD 396,10 la tonelada, mientras que la posición de setiembre registró un cambio de USD 388,93 a USD 379,84 la tonelada.
Granar explica que en esta baja influyeron las nuevas lluvias de diversa intensidad sobre el Medio Oeste, que continúan apuntalando el buen estado general de los cultivos. Además, menciona que los pronósticos auguran más precipitaciones para el resto de la semana, con los mayores acumulados sobre la porción este de esa zona núcleo para los granos gruesos de Estados Unidos.
Agrega que un fundamento bajista que se sumó al ya golpeado nivel de precios de los granos fue el intento de magnicidio ocurrido el sábado en EE. UU. contra el expresidente de ese país, Donald Trump, dado que en el mercado se especula con que ese hecho favorezca sus chances en las elecciones de noviembre. Y con él en la Casa Blanca, son muchos los que creen que podría sobrevenir una nueva versión de la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
En cuanto al maíz, la posición de setiembre pasó de USD 158,26 a USD 153,73 la tonelada, mientras que el contrato de diciembre varió de USD 163,28 a USD 159,15. En esto influyeron las buenas condiciones ambientales para los cultivos estadounidenses, con las nuevas lluvias sobre el cinturón sojero/maicero; la presión por el ingreso de la zafriña de Brasil en el circuito comercial, y la especulación con los hechos que podrían sobrevenir para el mercado de granos en una eventual nueva presidencia de Trump en Estados Unidos, particularmente en la relación comercial con China.
Por su parte, las posiciones del trigo quedaron en USD 195,64 (setiembre) y USD 204,46 (diciembre). Siguió influyendo el informe mensual que el viernes publicó el USDA, donde el organismo sorprendió al elevar su estimación sobre la cosecha de EE. UU. de 51,02 a 54,66 millones de toneladas, contra los 51,96 millones esperados por los operadores.
Pese a los problemas que atraviesa la producción en la Unión Europea y en zonas de Rusia y de Ucrania, persiste la presión sobre el mercado internacional por el progreso de la recolección del cereal en todo el hemisferio Norte, dado que es el momento de mayor entrada de grano nuevo en el circuito comercial en forma simultánea.
