Hoy en día hacer un confinamiento de alto volumen sin la incorporación de la agricultura es prácticamente imposible, sobre todo para asegurar la producción de voluminosos, que es lo esencial para llevar a cabo un proyecto a gran escala, aseguró en Nación Productiva Guillermo Cabañas, gerente de Agroganadera Don Chiquito. Además, remarcó el poco margen del negocio ganadero, debido al alto costo de los insumos y las fluctuaciones del precio del ganado.

 

En el agroclásico de los domingos Cabañas explicó que la unidad productiva, ubicada en Infante Rivarola, departamento de Boquerón, enfatiza la producción de voluminosos y un 20 % del área es destinado a la producción de maíz grano húmedo para abaratar el costo de energía en el confinamiento, ya que el 70 % de la materia prima se compra de afuera.

 

Mencionó que el Chaco registró muchas mermas en cuanto a la producción agrícola debido a los factores climáticos, por lo que el costo de la alimentación del ganado se encareció bastante, ya que las zonas graníferas están alejadas, lo que significa un alto costo del flete.

 

Acotó, además, que las proyecciones que se hacen dentro del esquema productivo para un proyecto económico a plazo de ciclos anuales se complican por la variabilidad y fluctuaciones del precio del ganado.

 

Dentro de la coyuntura actual, explicó que la principal estrategia nutricional que se puede plantear en un confinamiento es tratar de comprar o conseguir insumos que puedan abaratar los costos de la dieta. En este aspecto, precisó que muchos de los ingredientes, como las semillas de algodón y las cascarillas de soja, ya están escaseando.

 

Agroganadera Don Chiquito cuenta con 1280 hectáreas de superficie agrícola bajo sistema de riego con pivotes, que es una infraestructura fundamental para la producción agropecuaria, teniendo en cuenta que en esta zona del país la pluviometría se encuentra en torno a 500 y 600 mm de forma anual.

 

El profesional remarcó que el riego sirve para garantizar una buena humedad y realizar las siembras en el momento ideal, y que las lluvias siguen siendo importantes para el desarrollo de las plantas y una buena producción de granos, situación que se resintió en la última campaña, que tuvo bajos rendimientos.

 

Por otra parte, destacó que la infraestructura del confinamiento cuenta con una planta automatizada con capacidad para alimentar a 30 000 cabezas de ganado de forma diaria.

 

El 90 % del ganado del confinamiento corresponde a animales de compra, adquiridos de productores de la zona, principalmente, con el objetivo de abaratar el costo del traslado, según explicó.

 

Agregó que un 10 % del stock de los animales confinados forma parte de la unidad de hotelería bovina que posee el establecimiento. “La idea es fomentar y tratar de generar alianzas con productores de la zona para la provisión de animales de sobreaño, principalmente, para que el ciclo no sea tan tardío y que el retorno sea más rápido”, acotó el profesional.

 

Cabañas recalcó que la tendencia que marca el precio del ganado es el precio del gordo en el frigorífico, motivo por el cual los productores deben tener la capacidad de salir a comprar animales a buen precio en este tipo de situaciones, de modo a hacer las diferencias entre la compra y venta, y lograr ese margen de rentabilidad y seguridad.

 

Sostuvo también que hoy en día la reposición está un poco complicada. “Está difícil conseguir animales a buen precio”, lamentó. En este contexto de poco margen, enfatizó que el productor está obligado a hacer mayor volumen para lograr una mejor ganancia.

 

«De 3,50 que teníamos a inicio de año a tener precios de pandemia, desacomoda a cualquier productor», afirmó Guillermo Cabañas.

 

Reafirmó, asimismo, la necesidad de un mejor precio desde la industria, para que el negocio de la producción de carne sea sostenible. Además, de que los gremios puedan hacer presión y que el Gobierno se interese por la situación porque las fluctuaciones son muy grandes, el productor necesita seguridad y una situación como esta genera desmotivación en el rubro, concluyó.

 

[Foto icon-camera : Guillermo Cabañas / Archivo / Ganadería Productiva]