El Ing. Agr. Antonio Tischler, agricultor de la zona de Obligado, departamento de Itapúa, durante una visita a su campo mencionó a Productiva que los productores están preocupados por el severo ataque de chinche marrón a cultivos de soja, por lo que están probando varios productos para combatirla. Agregó que en esta región también se observan focos de roya, aunque acotó que la enfermedad está siendo controlada con aplicaciones tempranas.
El productor destacó que hasta el momento los cultivos están presentando buen desarrollo. “Prácticamente todos los cultivos de zafra, tanto soja como maíz zafra, tienen buen desarrollo. Por lo menos en la zona de Morena´i, Obligado, departamento de Itapúa, el clima está ayudando, lo que facilita el trabajo de campo”, afirmó.
En cuanto a plagas, comentó que se puede hablar de un ataque severo de chinche marrón. Precisó que ante la fuerte presión se están probando varios productos para combatirlas, pero se observa resistencia a algunos de ellos.
“Vamos a ver si a medida que pasan los días, puede mermar o ver si mejoran las condiciones climáticas para su control, porque con la humedad se puede hacer un control más biológico sobre el cultivo”, añadió.
Respecto a las enfermedades, dijo que si bien hay focos iniciales de roya, la mayoría de los productores ya están conscientes de hacer una aplicación temprana vegetativa, usan productos de punta, los multisitios, y recalcó que el principal problema actualmente son los insectos.
Por otra parte, sobre el clima, señaló que hay días de temperaturas altas, pero rápidamente vienen los frentes fríos y apaciguan un posible estrés en el cultivo. En estos momentos no estamos viendo nivel de estrés, indicó.
“Justamente, la soja está en una etapa en la que recién está creciendo y no es tan urgente la necesidad de las lluvias, pero siempre llegan en los momentos indicados”, acotó.
Comentó que normalmente la siembra en esta parte del país arranca a finales de agosto o setiembre, a medida que se vayan liberando las parcelas. Este año se implantó un poco más de trigo, que vino sobre maíz zafriña. Esta situación prolongó más la siembra hasta el 31 de octubre, pero dentro de un buen periodo, destacó.
Enfatizó que con el precio actual el punto de equilibrio del productor, utilizando toda la tecnología, está en 2000 kg por hectárea. “Siempre tecnología de punta, buen abono, aplicación de cloreto y los buenos fungicidas, que hoy en promedio llegan a cuatro aplicaciones, sumado todo el costo ya pasa los USD 120 a USD 130”, según el productor.
“Con el precio actual de la soja, oscilando entre los USD 300 a 350 más o menos, yo calcularía que está cerca de 2000 kg”, sostuvo.
Por último, el productor señaló que sigue intacta la esperanza de tener un buen año agrícola, esperando que las lluvias sean más generalizadas y lleguen a todo el país. Sabiendo que hay zonas que arrastran cuatro años de sequía, eso golpea y tenemos la esperanza de que sea un buen año, concluyó.
[Foto: Ing. Agr. Antonio Tischler / Productiva C&M]