En Nación Productiva el Lic. Marcos Kain, secretario general de la Asociación de Productores Agropecuarios para un Chaco Sustentable (Apacs), director del Servicio de Gerenciamiento Agrícola (SGA) y de Kurepa Kue, mencionó que las proyecciones de siembra agrícola 2024/2025 para la región Ocidental son óptimas respecto a la zafra anterior; sin embargo, esta campaña exige una mejor planificación, mayor cautela sobre el negocio y un análisis sobre los costos de producción.
Durante el agroclásico de los domingos Kain subrayó que la actual campaña agrícola chaqueña se torna bastante analítica para el productor en los costos y precisa de una mejor toma de decisiones para defender el margen de rentabilidad, luego del quebranto del año anterior.
Ante la consolidación de la agricultura del Chaco, indicó que: “es una campaña donde el productor tiene que sentarse a hacer números. Si tiene posibilidades de captar valor, que lo haga, o hacer un forward con un seguro de precios, hacerlo”.
Puntualizó también sobre la necesidad de mantener cautela sobre el negocio, mejorar la planificación y los negocios con respecto a los insumos y ventas posteriores. Asimismo, resaltó la importancia de cuidar las aplicaciones, atendiendo las mejores condiciones agronómicas en esta zafra. “Tenemos que recuperar lo que perdimos el año pasado”, sostuvo.
Mencionó que los costos de producción de soja en la región chaqueña para campos propios se manejan entre USD 460 y USD 550 en alquilados. “Eso da un rinde, a un Chicago de mayo 2025, de 1700 kg de soja en campo alquilado y menos en propio”, acotó.
En el caso del maíz, el punto de equilibrio estimado es de 3500 a 4000 kg, refirió. A pesar de que agronómicamente es necesario, indicó que su comercialización en el Chaco es lenta, esto dificulta la logística del negocio. “Vender el maíz a puerto, como se hace con la soja, es inviable por el precio del flete”, destacó.
Por otro lado, señaló que la semilla de algodón como subproducto entró fuertemente en el Chaco. Indicó que el interés creciente se debe a su rusticidad en el ambiente chaqueño, sumada al crecimiento de la industria y la capacidad para el desmote.
No obstante, el área de este rubro no es significativa para los semilleros, atendiendo la necesidad de materiales más adaptados.
“A la hora de abrir campos el algodón responde muy bien a la adaptabilidad del suelo. Después hay variaciones que se irán ajustando, como la comercialización, la industria, el desmoste, que son procesos pesados del cultivo con inversiones largas”, enfatizó el profesional.
El costo de producción de algodón ronda los 900 a 950 USD/hectárea, dependiendo de las aplicaciones necesarias.
Finalmente, un rubro que viene ganando protagonismo es el sorgo, que creció en área y que es una alternativa para el consumo animal, aunque el problema que presenta el cultivo es el ataque de pájaros. “El productor va buscando planteos más económicos, defensivos y rústico”, resaltó.
De acuerdo con los datos de la Apacs, la superficie agrícola chaqueña estimada para esta campaña es de 329 276 hectáreas (soja, maíz, sorgo, algodón, girasol, poroto, maní, chía, cártamo, sésamo, arroz y cultivos de servicio) versus las 325 549 hectáreas proyectadas en la zafra anterior. Explicó que el aumento limitado en área se debe a la caída de la soja en Boquerón, departamento que abarca el 73 % del área agrícola del Chaco, por las condiciones climáticas adversas.
En Alto Paraguay se prevén 47 651 hectáreas de cultivos agrícolas, mientras que en la campaña anterior se estimaron 35 458 hectáreas “Está creciendo en área y son áreas nuevas que se están dedicando a la agricultura, principalmente, se vuelcan a soja”, detalló el entrevistado.
Por su parte, en Boquerón el área estimada es de 238 756 hectáreas versus las 247 464 hectáreas de la zafra anterior, teniendo en cuenta el descenso de la superficie de soja y maíz.
En lo que respecta a Presidente Hayes, se proyectan 42 870 hectáreas, un leve aumento, respecto a las 42 627 hectáreas estimadas en la zafra pasado. Se observan crecimientos en la soja, maíz, arroz, sorgo, además de la aparición del girasol, reveló Kain.
“El productor sigue abriendo campos y se siguen incorporando hectáreas a la agricultura comercial o por la ganadería”, añadió.
[Foto : Marcos Kain / Nación Productiva]