A partir de la Resolución Nº 250 del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) se ha generado un ambiente tenso entre algunas asociaciones ganaderas y esta institución, ya que los gremios consideran que el documento solo le pone trabas a la labor del campo y ocasiona sobrecostos, puesto que un servicio que brindaba el Senacsa (toma de muestras de sangre para detección de brucelosis y tuberculosis, como uno de los requisitos sanitarios para la participación de animales en exposiciones) ahora queda exclusivamente a cargo de médicos veterinarios acreditados, es decir, del sector privado, hecho que eleva el costo de los productores. No obstante, algunos ganaderos están abiertos al diálogo y confían en que esta situación será próximamente subsanada.
El presidente de la Asociación Paraguaya de Criadores de Nelore, Luis Soljancic, explicó a Productiva, durante su participación en la 25º edición de la Expo Canindeyú (8 al 13 de abril), que desde febrero se encontraron con esta disposición por parte de Senacsa, motivo por el cual le solicitaron al presidente del ente estatal, José Carlos Martin Camperchioli, que reviera la situación.
La Resolución Nº 250 del 21 de febrero de 2025 contiene una serie de procedimientos para dar cumplimiento a las disposiciones sanitarias relativas a la realización de exposiciones nacionales e internacionales a ser desarrolladas en el país y afectan a todas las especies participantes.
Uno de esos requerimientos es la toma de muestra de sangre para el análisis sobre presencia o no de brucelosis y tuberculosis, que siempre estuvo a cargo de las unidades zonales del Senacsa, según explicó. Sin embargo, a partir de esta disposición, la tarea pasa a manos del sector privado, por medio de veterinarios acreditados por el Senacsa, hecho que les genera un mayor costo a los productores.
Ante esto, ayer 9 de abril, la Asociación Paraguaya de Criadores de Braford (APCB), la Asociación Paraguaya de Criadores de Senepol (APCS), la Asociación de Criadores de Angus del Paraguay y la Asociación Paraguaya de Criadores de Ovinos (APCO) y hoy, la Hampshire Down Paraguay emitieron una nota abierta a la opinión pública, y especialmente a las autoridades del Senacsa, respecto a la resolución que, según los gremios, solo agrega burocracia, costos y trabas al sacrificado trabajo del productor pecuario. Enfatizaron que no están en contra del control sanitario, sino del exceso y del despropósito.
“Cuando empezamos a realizar esos trabajos para poder tener todas las documentaciones sanitarias que se requieren para llegar a los campos de exposiciones nos dimos cuenta de que el costo de eso aumentaba muchísimo para los productores. Entonces, tuvimos una reunión con el presidente de Senacsa y todo su equipo, le pedimos si podía volver y después de varias reuniones se llegó a un acuerdo y propuso establecer un sistema híbrido, es decir, que exista la posibilidad de hacerlo con el Senacsa, por medio de la unidad zonal que le corresponde, o con el sector privado”, mencionó.
Soljancic explicó que este servicio con el Senacsa tendría un costo de G 550 000 por la movilidad de los animales y luego los análisis correspondientes. No obstante, el monto sería menor al que se abonaría en el sector privado.
Explicó que el cobro de ese servicio por parte del Senacsa se debe establecer por decreto del presidente de la República, por lo que si bien reconoció que a pesar de que hay apertura por parte del servicio veterinario oficial, aún no saben cuándo podría concretarse una solución, ya que hay que considerar que los tiempos del sector público no son iguales a los del sector privado.
“Eso va a tener un costo para el productor de alrededor de G 550 000 por las movilidades que se tienen que hacer y que aceptamos. Pero el presidente también nos pidió que entendamos que los tiempos del sector público son diferentes a los tiempos del sector privado y que lleva un protocolo que tiene que firmar el ministro de Agricultura y Ganadería y luego el presidente de la República y vuelve al Senacsa. Pero en este momento está encaminado ya el decreto, solo faltaría la firma de los dos para que se pueda activar y se pueda volver a hacer como antes”, subrayó el titular de la Nelore.
Por su parte, Andrés “Pepo” Godoy, presidente de la Senepol Paraguay, habló también con respecto al tema y dijo que la asociación respeta lo que decida la central y que todo la molestia radica en que es la primera vez que se está cambiando la forma de trabajar, pero que con un diálogo cree que se podrá solucionar.
“Nosotros somos parte de un gremio, nosotros respetamos todo lo que se decide en nuestra central. Creo que son problemas súper solucionables. Hay que siempre apostar al diálogo, son inconvenientes que se dieron porque es la primera vez que se está haciendo esto de cambiar a privado lo que antes era del Estado. Yo creo que se pueden hacer ambas cosas, yo creo que está en manos del Estado, nosotros solo acompañamos y queremos que sea lo mejor para el productor porque somos productores”, resaltó Godoy.
[Foto: Luis Soljancic, presidente de la Nelore Paraguay / Productiva C&M]