La tradicional jornada de campo de la firma SemAgro, en J. Eulogio Estigarribia, fue novedosa no solo por la forma de transmisión, sino por las nuevas variedades expuestas que se destacan por sus cualidades como resistencia a la sequía y al calor, resistencia a la Pyricularia, calidad industrial y aptitudes forrajeras.

 

La jornada de campo se realizó el pasado 2 de setiembre en forma virtual, considerando el protocolo sanitario empleado por la pandemia. De todas formas, el encuentro, cuyo objetivo fue proporcionar información sobre el posicionamiento correcto de los materiales comerciales y difundir las nuevas variedades que se sumarán al mercado, tuvo un alcance importante a nivel nacional.

 

El Ing. Agr. Ramón López, asesor agrícola de SemAgro, comentó que es una actividad tradicional sobre el trigo que la empresa realiza cada año como apoyo a la difusión del cultivo. “Consideramos como empresa que el cultivo de trigo es importante, sobre todo para el invierno”, indicó.

 

Dijo que este evento tiene básicamente dos objetivos: obtener información a nivel local, de tal modo a utilizarla en el futuro para las nuevas recomendaciones, y presentar al público, ya sean productores, técnicos o estudiantes, las novedades en cuanto a genética de trigo se refiere. “Normalmente, en la jornada de campo insistimos en los materiales genéticos, y en esta oportunidad participaron tres obtentores: el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), Biotrigo y OR Sementes de Brasil, que proveyeron sus materiales para la presentación”, precisó.

 

Resaltó que la jornada tuvo, además, el apoyo de otras empresas como Agrotec, que cada año la acompaña con su portafolio de productos para el rubro, desde el tratamiento de semillas hasta el fin del cultivo, y AgrPRO, que brindó las recomendaciones sobre la fertilización del trigo.

 

Mencionó que, en términos generales, las condiciones ambientales para el trigo en Campo 9 fueron buenas. Agregó que este es un cultivo que tolera hasta cierta medida la falta de agua y con base en esa premisa, comentó que empezó el ciclo con buenas precipitaciones, pero, posteriormente, desde el 7 julio al 12 agosto (35 días), cayeron solamente dos milímetros de agua; no obstante, el cultivo expuesto en la parcela estaba en buenas condiciones y presentaba capacidad para seguir cargando en aquel momento.

 

López destacó que la intención es tratar de insistir en el trigo, pero de forma más inteligente, en el sentido de utilizar los mejores suelos, preferentemente áreas de rotación en lugares donde en lo posible no haya habido trigo el año anterior, con el propósito de bajar la incidencia de enfermedades como manchas y también reducir los costos de los herbicidas, que son necesarios para el cultivo.

 

La parcela expuesta tuvo una fertilización de base de 150 kg en la siembra de 10-27-10 y, posteriormente, una aplicación de urea de 120 kg por hectárea. Luego, recibió tres aplicaciones de fungicidas, que son los utilizados contra manchas y roya.

 

Asimismo, insistió en la necesidad de pensar en una buena cosecha desde el inicio, sembrando semillas certificadas, porque con esto se asegura la calidad genética del material sembrado.

 

“La semilla certificada normalmente expresa en mayor medida el potencial genético, lo que le permite al productor lograr el mayor rendimiento utilizando semillas certificadas”, manifestó.

 

Acompañamiento. Alfred Penner, gerente de SemAgro SA., comentó que, tradicionalmente, la empresa tiene su día de campo de trigo. “Por más que este año es un poco diferente, igual apostamos otra vez por el trigo porque el molino indefectiblemente necesita esta materia prima”, indicó.

 

Expresó que los días de campo son para que productores puedan ver la calidad del trigo, además de observar que existen variedades como el mejorador y el blanqueador, que el molino usa para conseguir buenos productos en el mercado.

 

Los obtentores están diariamente con los técnicos para ofrecer los mejores productos. “Los clientes normalmente siembran trigo alrededor de 5000 hectáreas y en SemAgro usamos 36 000 toneladas anuales, es decir, 3 000 000 de kg por mes”, acotó.

 

Con esta jornada podemos transmitirles a los productores y clientes del país la necesidad del campo en Paraguay. Seguimos trabajando con tranquilidad en el campo”, añadió.

 

IPTA. En la primera parada de los obtentores, el Ing. Agr. Pedro Chávez, responsable del Área de Desarrollo del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), presentó los materiales comerciales y de lanzamiento del Programa Nacional de Trigo, que se ejecuta en conjunto con el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) y la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).

 

Primeramente, destacó las bondades de la variedad Itapúa 80, que es bastante sembrada a nivel país, principalmente por su ciclo, que es una característica apetecible para el agricultor. El material se inserta al sistema de producción por ser flexible al manejo, lo que le permite al productor una siembra temprana de soja, siempre y cuando se maneje correctamente su fecha de siembra. Acotó que es bastante precoz y aunque varíe en su ciclo de acuerdo a la región en la que se encuentra, mantiene su precocidad en todas partes.

 

Agregó que la flexibilidad de manejo en cualquier tipo de suelo es fundamental, y por eso quizás esta variedad ha abarcado una gran parte de los campos.

 

Luego, habló de Itapúa 85, que es una variedad no muy difundida, pero actualmente está ganando espacio en el mercado. Dijo que posee un ciclo intermedio y se destaca por su sanidad foliar, principalmente, ante el ataque de las manchas foliares como Drechslera o Bipolaris. “Con este material se cumple uno de los objetivos del programa que es la sanidad de las variedades, ya que esto ayuda al productor a lograr un bajo costo del producto final”, indicó.

 

Itapúa 85 se posiciona para una siembra intermedia, mientras que Itapúa 80, para cierre de siembra. Posteriormente, presentó la variedad Itapúa 90, que se posiciona para reemplazar o ubicarse al lado del Itapúa 80, con un plus que es la calidad industrial y que además es resistente a la Pyricularia. “Creo que es la primera variedad que tenemos en el país resistente a las enfermedades foliares y su techo productivo es bastante alto”, resaltó.

 

Itapúa 95 es otra variedad que se destaca por la sanidad foliar. Ella cuenta con una pubescencia pronunciada en las hojas, en las vainas y espigas, lo que la diferencia de las otras variedades.

 

Explicó que estas variedades tienen la característica de calidad mejoradora. “La calidad es importante porque Brasil, nuestro principal mercado, prefiere una variedad de calidad mejorada para la mezclas con trigos de menor calidad y de esa manera hacer un pan apetecible para el consumidor final”, destacó.

 

Por último, presentó la Canindé 31, que es una variedad semiprecoz y precoz, dependiendo de la región donde se la siembra, que tiene muy buen desarrollo en cuanto al crecimiento con un plus especial como la tolerancia a condiciones adversas de déficit hídrico y altas temperaturas. Agregó que si se tienen limitaciones hídricas durante la generación de rendimiento, se estaría mitigando con Canindé 31, que es tolerante a la sequía. “Esto nos da una mayor adaptación a la zona norte del país”, añadió.

 

Finalmente, dijo que desde el Programa Nacional de Trigo, en conjunto con IPTA, Capeco e Inbio, se está trabajando para obtener variedades de alto techo productivo y de bajos costos, con el fin de aumentar la rentabilidad.

 

Biotrigo. En la segunda estación, la empresa Brava Tecnologies, presentó las variedades de Biotrigo disponibles en el mercado. Allí, el Ing. Agr. Pericles Santacruz, responsable del Área de Desarrollo de la empresa, comentó que una de las primeras variedades expuestas fue la TBIO Toruk, un trigo de origen francés y el primer material de la empresa Biotrigo en Paraguay, que se destaca por su alto techo productivo y porte bajo.

 

Respecto a su manejo, comentó que se debe cuidar la profundidad de siembra porque es un trigo que posee un hipocótilo bastante corto y su potencial es el vigor que tiene en el macollamiento, aproximadamente 3,5 macollos viables, y eso le da una productividad mayor. “No se recomienda colocar trigo sobre trigo”, resaltó.

 

El segundo material presentado fue TBIO Sossego, incorporado hace tres años en el mercado. Acotó que esta variedad tiene un manejo más tranquilo con las enfermedades de difícil control y manchas de hojas. Esta variedad se posiciona para las áreas de fertilidad media a baja y para apertura de siembra por su ciclo medio.

 

“El foco a tener en cuenta en este material sería el oídio porque debe ser monitoreado. Es una enfermedad de fácil control y hay herramientas para este caso”, acotó.

 

El tercer material destacado es el TBIO Sonic, que a diferencia de TBIO Toruk, es un trigo superprecoz y de todas las variedades a nivel país, es el de ciclo más rápido, ya que registra incluso 15 días menos y a los 60 días ya espiga. Añadió que este cultivar se posiciona para cierre de siembra por las épocas de heladas de cada región. Su peso de cada 1000 semillas es bastante elevado. Se recomienda la siembra de 300 a 350 plantas por m².

 

“Viendo la cantidad de macollos que produce, TBIO Sonic será menor, si se hace el mismo patrón que el TBIO Toruk. Es más para hacer trigo sobre trigo por sus niveles de resistencia a las manchas amarillas y roya”, agregó.

 

El nivel de productividad del TBIO Sonic es similar al de TBIO Toruk y de TBIO Sossego. Su ciclo es precoz, un aspecto muy importante porque el productor busca materiales que sean más cortos para poder pensar en la siembra de soja tempranera.

 

El material lanzado en la jornada virtual es el TBIO Audaz, un trigo mejorador y el más completo del portafolio de Biotrigo, debido a su manejo de enfermedades de difícil control y de hojas, además de su calidad industrial. “Reúne todas las características que el productor quiere hoy en día”, acotó Santacruz.

 

El quinto material expuesto fue el Energix 201, cuyo enfoque es la producción animal. Como en la región la producción de leche y el confinamiento son bastante conocidos, la empresa presenta esta opción, que es un mix de dos variedades, 45 % de una y 55 % de otra, lo que le proporciona masa verde y granos indicados para una mejor calidad de silaje.

 

Entre estas dos variedades que componen Energix 201, se destaca la falta de aristas, lo que se conoce como trigo pelado. En promedio se tienen 20 toneladas de materia verde para ensilaje y desde 10 a 13 fardos por hectárea.

 

“Con todos los materiales habilitados en Paraguay queremos llegar al productor con el mejor gerenciamiento de su área porque tenemos el trigo desde la apertura de siembra destinada a la fertilidad de media baja y baja inversión hasta un superprecoz para el cierre de siembra”, agregó.

 

La sugerencia sería iniciar con el TBIO Sossego en suelos de media a baja fertilidad, luego continuar el TBIO Toruk, por su ciclo medio, en las mejores áreas donde se realizará una inversión. Posteriormente, la recomendación es seguir con el TBIO Audaz, debido a su ciclo precoz, y terminar con TBIO Sonic de ciclo superprecoz. “Todas las variedades son de altos rendimientos y se posicionan para diferentes tipos de tierra y de inversiones”, resaltó.

 

OR Sementes. La tercera empresa expositora fue G20 Agro, que presentó los cultivares de OR Sementes de Brasil. El Ing. Agr. Christian Inacio, gerente comercial de la empresa, expresó que la empresa pone a disposición de los productores variedades productivas y de alta calidad industrial.

 

“En varios días de campo vamos recorriendo y preguntando a los productores de las diferentes regiones de Paraguay qué busca al sembrar trigo y las respuestas coincidieron en que es tener un trigo de alta productividad y rentabilidad que dé seguridad en el campo y calidad en la industria para que a la hora de venderlo no haya ningún inconveniente”, manifestó.

 

En la jornada de campo virtual la empresa presentó tres materiales. Uno de ellos es Madre Pérola, cuya clasificación es pan mejorador y blanqueador. A nivel de mercado y dentro de los blanqueadores, además de tener la harina más blanca, cuenta con el mayor techo productivo.

 

Inacio explicó que posee una materia prima que se usa para mezclar con otros trigos y blanquear la harina. Otra característica es su alto techo productivo, con rindes que superaron los 5000 kg por hectárea y en situaciones controladas en laboratorio llegó a los 8000 kg.

 

El material tiene una excelente resistencia frente a la Gibberella zeae (fusariosis de la espiga del trigo), una de las principales enfermedades de trigo en Paraguay. Además, posee buena resistencia al acame y buen peso de grano. Esta genética le ayuda al cultivo a mantener un mayor peso de hipocótilo, que aun en situaciones adversas al final del ciclo el trigo no baja y mantiene la calidad industrial. Esto garantiza la producción y posterior venta del productor.

 

Por otra parte, el ORS Citrino es un trigo más rústico de grano duro y resistente a Gibberella zeae y al acame, al igual que a manchas y otras enfermedades de la espiga. Su techo productivo es alto y se caracteriza por ser estable.

 

En la oportunidad también se expuso la variedad ORS Destak, que se encuentra en fase de registro y estará lista en forma comercial para la próxima campaña triguera. Se destaca porque en todos los ámbitos y aspectos de trigo tiene una calificación muy elevada.

 

Su peso de 1000 semillas superó los 40 g y es un trigo muy sano, 100 % resistente a Pyricularia o brusone y Gibberella, además de otras enfermedades que comprometen la espiga. También posee una resistencia contra la roya y el complejo de manchas foliares, como oídio y mosaico.

 

“Si el productor planta nuestro trigo, tiene la garantía de que va a estar tranquilo y a la hora de su cosecha no le dará inconvenientes porque mantiene una calidad para que venda a un buen precio y entregue a la industria un excelente producto para comercializar. Nuestro trigo es una excelente opción para el productor paraguayo”, resaltó.

 

Agrotec. En cuanto al manejo de las parcelas, la firma Agrotec acompañó la jornada virtual con su línea de productos. El Ing. Agr. Ever Benítez, asesor técnico de ventas de la firma en Campo 9, comentó que en este campo la siembra se realizó en dos épocas diferentes: la primera fue el 14 de mayo y la segunda, el 28 del mismo mes (14 días después).

 

En las dos épocas de siembra se realizó el mismo manejo, que consistió, primeramente, en la aplicación del fertilizante MicroEssentials 10- 27-10, que tiene varios beneficios como brindar los nutrientes N, P y S al grano.

 

Viene en dos presentaciones, el sulfato para la planta y el azufre elemental, que tiene un proceso de oxidación para que así pueda, posteriormente, ser soluble para la planta. Al brindar NPS al grano, ya tiene el beneficio de una uniformidad de la cantidad de nutrientes por unidad de superficie.

 

También se realizaron tres aplicaciones de fungicidas. Con cada una se aprovechó para hacer los controles de plagas. La primera se hizo en etapa de macollamiento con el Antares, una mezcla de triazol y estrobirulina.

 

Cada aplicación fue hecha con el Unizeb Gold, un producto patentado de UPL. Asimismo, se aplicó el TA 35, que es un antievaporante, antideriva, humectante y adherente.

 

En esa primera aplicación se utilizaron dos insecticidas, uno de ellos (el Quintal Xtra) para combatir orugas, en caso de que haya presencia.

 

La segunda aplicación se hizo con el Aproach Power, una mezcla de triazol y estrobirulina, con el Unizeb Gold, el TA 35, Quintal Xtra y se utilizó en este caso el Accion Plus 60 SC, un neonicotinoide interesante para trabajar contra los pulgones.

 

En la tercera aplicación se utilizó el Patriot y se dejó de usar el Quintal Xtra porque en esta etapa la incidencia de la oruga era menor. “Cuando encontramos una presencia de automáticamente estamos perdiendo de 10 a 15 % de productividad, entonces, si no hacemos ese buen control preventivo, ya estamos perdiendo porque es una enfermedad que rápidamente se disemina y después para controlar una incidencia severa es muy difícil”, explicó.

 

[Material publicado en la edición de setiembre de Revista Productiva, sección “Actividad”, páginas 36, 37 y 38]
[Foto icon-camera : Revista Productiva]