La tendencia alcista de los precios del ganado vacuno, así como otros problemas relacionados con los costes de alimentación de los animales generan incertidumbre sobre cuál será la evolución del comercio mundial de carne bovina en el 2021, señala el último informe trimestral de la entidad financiera Rabobank.
En su informe trimestral, Rabobank se cuestiona hasta cuándo va a durar la tendencia de precios altos para la carne y ganado vacuno. Además, considera que hay otros problemas actuales que están afectando al comercio de la proteína roja a nivel mundial.
Entre los puntos cuestionados, se resalta la puesta en marcha de los planes de vacunación contra la Covid-19 en el mundo y el inicio de un crecimiento económico más sólido que los anteriores, además del avance del verano en el hemisferio norte que están llevando a que el canal foodservice, en especial la restauración, incremente sus ventas.
En el caso de China, las cifras de venta del canal foodservice en marzo se incrementaron, ya que en enero de 2020 y las de este segmento en Estados Unidos para abril superaron también los números obtenidos en el primer mes del año pasado.
Rabobank señala que la continua reapertura del canal foodservice debería respaldar la demanda actual de carne vacuna. En tanto, la baja disponibilidad de la mano de obra está comenzando a restringir las operaciones en algunas plantas, especialmente en Estados Unidos.
Asimismo, se tiene en cuenta el cierre de las exportaciones argentinas durante 30 días en la búsqueda de aliviar el incremento de los precios de la carne bovina en el mercado interno. “Dado que Argentina suministró el 22 % de las importaciones de China en el primer trimestre de 2021, esto podría ser optimista para negociar los precios de la carne de vacuno, dependiendo de cuánto tiempo permanezca la prohibición”, menciona la entidad.
Por otra parte, a nivel mundial el sector vacuno mantiene una fuerte tendencia del fomento de la sostenibilidad. En ese sentido, la empresa JBS anunció su compromiso para lograr emisiones cero de gases de efecto invernadero (GEI) para el 2040. De esta forma, la compañía se une a una lista creciente de compañías de proteínas animales que han establecido objetivos ambiciosos para la reducción de emisiones de GEI.
Rabobank, por último, muestra su preocupación ante el incremento de los costes de alimentación del ganado y su efecto sobre el comercio mundial de carne bovina. En los últimos tiempos los precios de las materias primas agrícolas subieron a niveles no vistos desde los años 2011-13, lo que generó preocupaciones sobre el costo de los piensos.
Rabobank pronostica que las cotizaciones del trigo, el maíz y la soja seguirán siendo altos, una preocupación para los productores de ganado estadounidense en espera de procesamiento y el ganado brasileño que enfrenta una escasa disponibilidad de pastos.
[Fuente: Eurocarne]