Con el propósito de cumplir con las exigencias de los países de destino de las cosechas, la Cámara de Fitosanitarios y Fertilizantes (Cafyf) compartió una serie de recomendaciones y conceptos importantes para determinar los límites máximos de residuos de plaguicidas (LMR) en los productos agrícolas.

 

Considerando las reglas más rigurosas establecidas por los mercados internacionales para que un producto pueda ser puesto en circulación o comercializado, el Ing. Agr. Miguel Colmán, coordinador de Programas de la Cafyf, presentó una guía técnica que permite identificar los límites máximos de residuos de plaguicidas (LMR) en los productos agrícolas.

 

En la actualidad, Brasil y la Unión Europea (UE) son algunos de los destinos de nuestras cosechas que establecieron normas más estrictas para el manejo de los LMR.

 

Cabe recordar que los límites máximos de residuos (LMR) significan la cantidad máxima de residuos de determinado defensivo agrícola sobre determinado producto agrícola permitida por la norma alimentaria vigente. La cantidad no puede ser sobrepasada para que el producto pueda ser puesto en circulación o comercializado.

 

Estos criterios se basan en el Codex Alimentarius o Código Alimentario que es un conjunto de normas alimentarias adoptadas internacionalmente y presentadas de manera uniforme, cuyo objetivo es proteger la salud del consumidor y facilitar el comercio internacional de alimentos. No obstante, las nuevas exigencias de algunos países sobre los LMR sobrepasan las exigencias de este código.

 

Desde la Cafyf señalan que la detección de los LMR mayores a los permitidos podría ocasionar rechazo de cargas y varios problemas tanto logísticos como de redireccionamiento. Para ello, la institución recomienda obtener más información sobre las tablas de LMR para los distintos mercados y cultivos de los datos disponibles en la página web de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).

 

Colmán resaltó la importancia de conocer los productos alternativos para remplazar los productos restringidos, realizar un adecuado manejo de los fitosanitarios leyendo las etiquetas e interpretando correctamente la información y respetar el periodo de carencia y reingreso.

 

Respecto al periodo de carencia, tiempo que hay que esperar entre la última aplicación de un fitosanitario y la cosecha, la recomendación es garantizar la seguridad para el consumidor, cumplir con los requisitos del mercado nacional e internacional y evitar el rechazo de producto y pérdida de mercado.

 

Asimismo, el coordinador de la Cafyf recordó que es importante considerar el tiempo de espera después de la aplicación de un producto fitosanitario para el reingreso de personas y/ o animales sin equipo de protección personal (periodo de reingreso).

 

“Es importante tener en cuenta las recomendaciones técnicas y cumplir las indicaciones de las etiquetas de los defensivos agrícolas para garantizar la producción de alimentos seguros y de calidad, además de mantener los mercados de nuestros productos agrícolas”, recomiendan desde la institución.

 

[Fuente: Cafyf]