El aporte de la biotecnología en los últimos años ha sido más que significativo para la agricultura en Paraguay. En este contexto, el maíz GM o genéticamente modificado ocupa un mayor protagonismo en nuestro país al combinar dos puntos principales: la tolerancia a pesticidas y herbicidas y la resistencia a insectos.

 

Con el avance de la ciencia la biotecnología ha evolucionado y trajo consigo múltiples beneficios para la agricultura. El Lic. Biotec. Andrés Quintana, coordinador de Posgrado e Investigación del Departamento de Biotecnología de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de Asunción (Facen-UNA), conversó con Nación Productiva, programa emitido los domingos a las 20:00 en canal PRO, para ahondar sobre el impacto del maíz GM en la ciencia y en la producción nacional.

 

Primeramente, mencionó que, según datos del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave), Paraguay cuenta con 40 eventos biotecnológicos aprobados, entre ellos en soja, algodón y maíz, que es el rubro de mayor importancia, indicó.

 

Señaló que esta relevancia se debe a la tolerancia tanto a pesticidas y herbicidas como la resistencia a insectos que atacan este cultivo. “Aquellos eventos que tienen una modificación y tengan una tolerancia van a ser consumidos, pero no van a ser totalmente devastados y no va a afectar el rendimiento a nivel global”, aclaró Quintana.

 

Sobre el aporte de los cultivos de maíz GM, el profesional resaltó que el mayor beneficio de la biotecnología se concentra en los eventos que son apilados, ya que por sus características ofrecen una resistencia a insectos, así como también tolerancia a los pesticidas. “Ambos se combinan y eso gana mayor protagonismo en nuestro país”, subrayó.

 

En este aspecto, recordó que el maíz es cultivo muy estudiado y consensuado por toda la comunidad científica donde se conocen y evalúan cuáles serían los efectos al utilizarlo.

 

Respecto a qué tipo de trabajos ligados a la biotecnología se pueden llegar a aplicar en variedades nativas de maíz, indicó que es posible emplear la secuenciación del genoma para conferirle una característica propiamente paraguaya. Quintana puntualizó que “la biotecnología puede saber no solamente su composición, sino agregarle alguna característica adicional y que sea de Paraguay. Ahora contamos con recursos humanos y también hay infraestructura donde se pueda dar utilidad a estas plantas nativas”.

 

Por otra parte, mencionó que se podría realizar una unión entre los resultados científicos y el agricultor, pero para ello será necesaria la creación de un nexo superior porque la parte productiva y la ciencia todavía trabajan en paralelo.

 

Finalmente, instó a las personas a acercarse a la universidad donde se encuentran todas las informaciones con sustento científico acerca del avance de la biotecnología y sus beneficios. “Que la gente no esté preocupada por escuchar de algún organismo modificado porque existe un estudio detrás y esto ayuda a un desarrollo sostenible”, concluyó.