Ante el impacto de la sequía en la región norte y noreste del país, el correcto manejo de la parte biológica y física del suelo, el uso de tecnologías y prácticas sustentables son algunas recomendaciones que el agricultor debe poner en práctica para mitigar el efecto negativo en la producción, sugirió Cleverson Pozzebon, asesor agrícola de la Estancia Anahí S.A., durante el programa Nación Productiva.

 

En entrevista con el programa Nación Productiva, emitido los domingos a las 20:00 en canal PRO, Cleverson Pozzebon, asesor agrícola de la Estancia Anahí S.A., ubicada en Corpus Cristi, departamento de Canindeyú, recomendó fortalecer los manejos del suelo para resistir la sequía, especialmente en el cultivo de soja, que está siendo afectado por el estrés hídrico.

 

Independientemente al tipo de suelo y la zona de producción, el manejo del suelo es considerado una herramienta fundamental para llevar adelante la producción. En ese sentido, Pozzebon resaltó la importancia de ajustar el sistema de producción, ya que al realizar una siembra directa sobre rastrojo y una sucesión de cultivos, existen las condiciones para soportar la sequía.

 

Destacó que es importante cuidar la parte biológica y la parte física del suelo, así como los aspectos relacionados con la compactación y la corrección de los suelos. “Jugar con los grupos de maduración y las fechas de siembra puede ser una estrategia para no asumir todo el riesgo”, aclaró.

 

El ingeniero agrónomo mencionó que en Canindeyú, al igual que en San Pedro, se observa una condición de estrés hídrico, ya que hace 40 días e incluso 50, no hay precipitaciones, por lo que las plantas están perdiendo su potencial ante esa variabilidad.

 

“Estamos aguantando bastante bien y la zona afectada por la sequía aún es privilegiada por el tipo de manejo del suelo y, principalmente, por la etapa de desarrollo del cultivo”, mencionó acerca de la situación actual de la Estancia Anahí S.A.

 

Pozzebon también resaltó la importancia de aprender cómo producir y almacenar agua en el suelo. “Nosotros somos buenos productores de granos, necesitamos aprender a ser buenos productores de agua”, enfatizó.

 

Por último, recordó que Paraguay es un país privilegiado por el clima que posee, la disponibilidad de tecnología de calidad y la buena voluntad de los agricultores. “Tenemos conocimientos, basta con tener algunos cuidados, usando los registros y las herramientas”, concluyó.