Además de apostar por una buena cobertura del suelo y mejor contenido de materia orgánica, prácticas que contribuyen al buen manejo de los suelos agrícolas, la recomendación del Ing. Agr. Pablo Arrúa, jefe de Desarrollo de Fertimax SAE, es acompañar con un plan estratégico de fertilización para apuntar a un maíz de alta productividad.

 

En entrevista con el programa Nación Productiva, emitido los domingos a las 20:00 en canal PRO, el Ing. Agr. Pablo Arrúa, jefe de Desarrollo de Fertimax SAE, habló de la importancia de la fertilización estratégica dentro de los planteos de alta productividad agrícola. Hizo hincapié en que esta herramienta ayudará al cultivo de maíz a obtener una mejor respuesta, siempre y cuando vaya acompañado de un manejo adecuado del suelo.

 

El ingeniero mencionó que una buena fertilización es necesaria para pensar en un maíz de alta productividad. “Siempre que el maíz tenga una buena fertilización, él va a responder”, indicó.

 

En ese sentido, dijo que es importante que el productor no piense solamente en el costo del plan de fertilización, sino en los beneficios que ofrece en cuanto a rendimientos. Acotó que hay que mantener los márgenes iguales entre los insumos y la venta de los granos finales para que valga la pena esa fertilización de base y cobertura.

 

Otra recomendación que compartió Arrúa durante el programa fue pensar en un suelo de calidad y con buena cantidad de materia orgánica, ya que, por lo general, en Paraguay los maíces de alta productividad registran rindes de 7000 hasta incluso 10 000 kg por hectárea, que son casos más marcados, según explicó el profesional.